LA VERDAD SOBRE GUN XVIII
<< Absorta en ver como aquel ser que anteriormente se había convertido, para mí, en dios duro, violento y casi omnipresente, desaparecía mostrando sus pies de barro. Olvide por completo que no nos hallábamos solos. Recién di cuenta de ellos cuando sentí sus pasos cerca. Uno paso por mi lado sin notarme siquiera. Los cuatro rodearon a Chas, quien permanecía en el suelo con el rostro tapado con sus manos. No los noto o no quiso hacerlo.>>
<< Permanecieron al rededor de Chas por unos minutos. Siempre en cada minuto permanecieron en silencio, como si estuvieran ejecutando algún tipo de ritual. Uno de los cuatro se aparto unos metros, para tomar una roca pesada, tan pesada que debía utilizar sus dos manos al levantarla. Trabajosamente se acerco nuevamente a la ronda. Cuando estuvo integrado, quien se hallaba frente a él levanto los brazos y por ves primera desde que yo había sido obligada a unirme al grupo, hablo>>
-Dios padre este hombre a fracasado en su misión, llevándonos a la desesperación. Permítenos castigarlo como debe ser. Con la justicia que brinda la lapidación.
Autor: Nicolás Federico Esteban Vilaró-Tronfi
No hay comentarios:
Publicar un comentario