LA MAÑANA SIGUIENTE II
-¿Y, Estela?-. La pregunta surge de mi boca en pleno envión. No debería mostrarme tan interesado en ella, especialmente delante de su marido. Ya de por si Estela tiene demasiadas complicaciones en su vida, como para que yo venga a hundirle mas la relación con el impotente. Pero después de todo me es difícil ocultar mi interés, pues hace varios días que no hablo con ella. Después de la última noche que pasamos juntos. Supongo que nuestras conversaciones de alcoba no son, justamente, agradables confesiones de amores pasados o penas superadas. Son mas bien, duros traumas psicológicos, donde la debilidades del otro es un golpe mortal para uno. Me remuerde la conciencia el haber intentado justificarme tanto a la hora de hablar de mis faltas. Cuando ella abrió su mas oscuro secreto para mí. Debería haberme callado, pero las evasivas son peores con el tiempo.
Autor: Nicolás Federico Esteban Vilaró-Tronfi.
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